(Imagen: Netflix)
  Estimados lectores:
Paquita tiene una pena 
Paquita quiere más 
Con el mundo por montera maneja la ciudad 
Ayy si Paquita supiera, quien maneja su suerte 
Un prodigio su mente y su forma de andar 
Ay Paquita, señora niña bonita 
Pasión tesón que andando es mucho más fácil llegar
Ay Paquita, consígame usted una visita 
Todos te quieren todos te buscan.

Así es la letra con la que comienza la serie y que resume perfectamente la personalidad de la protagonista Paquita Salas, personaje todoterreno y fenómeno de masas. Pero ¿qué es lo que hace tan especial a esta serie?

Lo primero que hay que afrontar a la hora de hablar de esta serie es su condición de origen, al comenzar su emisión en forma de webserie en la plataforma Flooxer, brindando una libertad creativa que ha sabido aprovechar al máximo tanto en su forma como en su contenido. La media hora aproximada de duración es algo que necesitaba la ficción española y se nota a la hora de crear momentos cómicos icónicos (el mail y el fax, por ejemplo), combinándolo con el formato de documental falso, logrando adaptar este recurso visto en ficciones extranjeras al medio español, sin olvidar nunca la cultura mediática española de los últimos años.

Por otro lado, tenemos su historia, narrando las desventuras de una mujer que no se ha actualizado a los nuevos tiempos de la industria del entretenimiento española. Tanto las miserias de la industria como lo que representa Paquita (las viejas costumbres, que no valores) son los elementos principales donde podemos admirar la valentía de sus autores a la hora de reflejar estas desdichas desde la admiración, porque Paquita Salas fácilmente podría haber sido un drama de grandes dimensiones. Sin embargo, optó por lo más sano: utilizar el sentido del humor.


(Imagen: eCartelera)

Además de estos ingredientes, la serie logra tener un sentido autoral por parte de Javier Ambrossi y Javier Calvo, quienes ya habían creado "La Llamada", película y obra de teatro donde ya muestran su espíritu de osadía, donde las referencias a la cultura pop se entremezclan con personajes con ansias de romper con lo establecido, o mejor dicho, donde tomar riesgos es la única forma de lograr avanzar. Paquita Salas es sobre todo la historia de caídas, ya sea de ella misma o de la industria, y su espíritu para lograr evolucionar. Por ello, su salto a Netflix y el apoyo de muchos artistas colaborando con la serie es la respuesta natural a esta idea que representa.

En conclusión, por su espíritu innovador y la idea que transmite, Paquita Salas es una serie que logra ser un producto que no tiene límites a la hora de intentar superarse: a nivel de hacer una promo con los niños de Stranger Things, y eso es bueno, sobre todo para cualquier espectador inquieto.

Un cordial saludo.


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